ATARDECER EN SANT BOI DE LLOBREGAT

En el fragmentado espacio donde discurre el devenir de todos los acontecimientos se disuelve el tiempo dejando tras de sí el breve rastro de lo efímero, de lo vivido. En un soplo de aire queda contenido todo el flujo de experiencias adquiridas, en un leve suspiro retenido se condensa el pensamiento en el antes y el después de otros tiempos. Todos los tiempos agolpados en un mismo momento, ahora, solo ahora, un segundo pasado ya es historia y el siguiente siempre es el ahora. Todo quedó transformado, la mutación se evidencia en la memoria de la piel, en el sentir, en el cansancio de ciertos trayectos. Los pensamientos acuden en horas intempestuosas pronunciando su sentencia, bien o mal, bueno o malo, los juicios de valores se adhieren a la mente convirtiendo ese tiempo que se evapora en un tiempo de no-retorno, el pasado ya no existe en el momento en que se produce el choque entre las fronteras invisibles del no-tiempo ido y no llegado. Las mareas se disuelven con la

El discurso de Martin Luther King está considerado uno de los mejores discursos de la historia, un discurso que como la gran mayoría ya sabe nació en favor de la libertad de los pueblos, de la libertad y derechos de todos los pueblos sin distinción de idelogías políticas o religiosas, sin distinción del color de la piel.  Luther King soñó con un mundo mejor en el que todos los seres humanos convivieran en paz, un sueño de amor, esperanza, de igualdad entre semejantes...de libertad. Soñó con un mundo en el que la violencia no tuviera cabida y en el que el respeto por las diferencias fuera posible, un mundo sin violencia, sin  armas. Soñó con un mundo en el que el abuso de poder quedara erradicado y la convivencia entre hermanos fuera realidad. Un sueño que sigue vigente en la actualidad, que merece ser recordado cuando la violencia sigue desatada, cuando el abuso de poder sigue golpeando en la cara a los afroamericanos en EEUU, y en otros lugares del mundo,